divendres, 30 de gener del 2009

Isla Saona junio 2008


EXCURSION ISLA SAONA-CANTO DE LA PLAYAGracias a este foro decidí decantarme por el Capitán Gringo y aunque no puedo comparar con la que ofrecen los tour-operadores ,estoy seguro que acerté y pasamos un dia divertido e inolvidable.Bueno como creo ya sabeis se hace la reserva via internet y al llegar a Punta Cana hay que llamarle par confirmarle nuestra llegada.7 H. RECOGIDA EN EL HOTELNos cito a las 7 h. en la puerta del Bahía y a las 7 h. llego Rafa con su monovolumen, puntualidad británica en el Caribe, bravo!.Ya iban arriba 6 chicos catalanes que había recogido en el Riu.Para mi la excursión empieza en ese instante, tres dias en la “jaula de oro” es mucho, y salir del hotel es lo que mas enriquece en estos viajes, aunque nosotros nos teníamos que adaptar a nuestras niñas y no darles mucha caña, así que desde el momento en que Rafa arranco el motor nosotros estuvimos con los ojos bien abiertos para no perdernos ni un solo detalle de este precioso país.La primera parte del recorrido hasta que enlazamos con la carretera de Higuey es un autentico patatal, baches por doquier , la Republica Dominicana en su estado mas puro, pero el paisaje selvático es majestuoso. Rafa es un chico muy joven de piel clara, según mi mujer , muy guapo, ha puesto en el cd la musica que esta de moda ahora en la Republica, a principio nos suena un poco “rara”, pero poco a poco nos va gustando, nos dice que es “Omega”. Rafa nos va contando cosas de su país, que para él son cotidianas y para nosotros sorpresivas, mientras el paisaje va cambiando, ya no es tan salvaje y vemos como la mano del hombre va modificandolo. Llegamos a Higuey después de haber atravesado un pequeño pueblo, ojo avizor y cámara en mano, porque allá donde dirijas la vista hay una imagen chocante para nosotros. nada se parece a la burbuja artificial de nuestro hotel, pero esto es autentico, caos circulatorio donde el claxon es el rey, la carne esta expuesta al pie de calle con un color nada apetecible, el tendido electrico va todo colgando y la suciedad es una parte mas de un decorado donde contrastan los niños que a estas horas se dirigen al colegio perfectamente acicalados y uniformados. A la salida de Higuey podemos observar a lo lejos su Catedral de estilo moderno. Tambien nos llama la atención la cantidad de vehículos todo-terreno de gama alta que exponen los compra-ventas, con un sueldo medio de 200 € nos pregutamos quien será el comprador.En la ultima parte de nuestro recorrido atravesamos una planicie en la que se cultiva la caña de azúcar, podemos ver algunos hombres seguramente Haitianos que están cortando la caña igual que lo hicieron sus antepasados llegados de África hace mas de cinco siglos, es triste pensar como estas personas no han conseguido evolucionar durante todo ese tiempo. La caña después de ser cortada la cargan en unos carros remolcados por dos robustos bueyes, toda una imagen ancestral que todavía podemos ver en la Republica.Poco antes de llegar a Bayahibe paramos en un colmado en la misma carretera, vamos a conocer por fin al Capitán Gringo. El se encuentra en la trastienda, sus rasgos norteños delatan el porque de su apodo, aunque sus movimientos son absolutamente caribeños, este hombre transmite una calma y serenidad absoluta, en nuestro vertiginoso mundo le atropellaría un autobús nada mas salir de Barajas. Después de pagarle observé tres niños detrás de una reja en la parte trasera del colmado, me acerqué y el mayor de ellos me pide un dólar para los tres, a lo cual accedo advirtiendole antes que lo comparta con sus compañeros, seguidamente una mujer mayor que estaba limpiando el local y que había observado la escena me pide otro dólar, esta vez digo que no ante el peligro que el resto de clientes se pusieran en la cola.LLEGADA A BAYAHIBE :Bajamos del monovolumen a pie de playa y uniendonos al otro grupo que venia con Cristian “el flaquito” somos distribuidos por el Capitán Gringo en las dos lanchas, a nosotros nos corresponde la del Capitán “la Mula” la otra lancha es la del Capitán “Viruta”, después de ponernos los chalecos partimos rumbo al paraíso.La lancha va a todo gas, una de mis preocupaciones antes de hacer esta excursión era si mis niñas se iban a asustar con los botes y la velocidad de la lancha, después de unas millas observo la cara de felicidad de mi pequeña Mar de tres años y me doy cuenta de que todo era imaginación mia.Paramos un momento y los capitanes unen las dos embarcaciones y hacen la presentación de la tripulación, los dos cocineros, la reportera que graba un video que después podeís comprar y de ellos mismos, fuertes aplausos y el ambiente se empieza a caldear.Después de bordear el Parque Nacional del Este, llegamos rápido a Saona, hacemos una parada en una playa donde dejamos a los cocineros, despidiendoles con una gran ovación para que se esmeren preparando nuestra comida.Nos dirigimos a nuestra próxima parada el poblado pescador de Mano Juan, durante el trayecto hemos podido disfrutar de los continuos cambios de color del mar, azul, verde esmeralda y siempre con el fondo de cocoteros espectacular.El poblado es solo una calle con chozas de alegres colores a un lado y a otro, pero un tanto desangelado, sus pobladores a parte de la pesca se dedican a la venta de artesanía, pero quizás contagiados por el calor sofocante tampoco ponen demasiado énfasis en su objetivo, cosa que se agradece. A todo esto deciros que hemos llegado los primeros, este poblado mas tarde cuando llegan los catamaranes se pone a tope, ventajas de la lancha rápida.PLAYA DEL DOCTOR :Después de lo que habiamos visto hasta entonces , creiamos que ya no podíamos ver nada mejor, pero al llegar a la playa del Doctor nos dimos cuenta que habíamos llegado al súmmum.A esta playa solo llega Gringo, es la estampa del Caribe que todos hemos soñado, el decorador que ha hecho esto merece un Oscar, todo esta en su sitio, arena fina y blanca, agua cristalina, los cocoteros, la barrera de coral y…. todo esto solo para nosotros,Por fin nuestros capitanes sacan el ron y a pie de playa tomamos un aperitivo mientras nos presentan a tres lugareños que alli nos esperaban, dos chicas, una hace masajes con leche de coco,(15 usd.),otra hace trenzas y Juan un hombre de edad incierta y que vende cocos a 2 usd.Tenemos casi dos horas para disfrutar de este lugar y cada cual lo disfruta a su manera, haciendo fotos, snorkel, o disfrutando de un masaje a la sombra de un cocotero, como todo no podia ser tan idilico deciros que hay dos tipos de mosquitos ,unos como los nuestros y otros casi como un saltamontes, después de 15 dias que vine, todavía conservo sus “besitos”, así que imprescindible el repelente de insectos.Dos noticias, una buena y una mala. nos vamos a comer…BIEEN¡ debemos subir a la lancha y abandonar esta playa…. OOHHH¡.LA LANGOSTA :Volvemos donde dejamos a los cocineros, lo tienen todo listo, en la misma playa hay un par de mesas con sombra e improvisan un pequeño buffett con langosta, pescado, patatas y ensalada por supuesto cerveza Presidente bien fresquita, agua y refrescos. Para los que no les gusta el marisco tambien hay pollo, pero teneís que avisarlo al contratar la excursión. Siempre me habían dicho que el marisco del Caribe no era como el que tenemos en España, tengo que decir que esta langosta estaba riquisima e incluso repetimos, porque la había en cantidad.LAS PISCINAS NATURALES :Era uno de los “platos fuertes” de la excursión, no estan demasiado lejos de donde comimos, se situan entre el estrecho que separa Saona de La Española. Poco antes de llegar el Capitán se detuvo para que pudieramos observar y tocar las estrellas de mar, aunque estaban a unos 3 metros de profundidad desde arriba de la lancha se las veia perfectamente, yo no me lo pensé y salte al agua. Nunca he sido un gran nadador, diria mas, se nadar lo justito, una vez en el agua a duras penas conseguí colocarme las gafas y me sumergí para coger una estrella. pero mi sorpresa fue que estaba mas profundo de lo que parecía desde arriba y por un momento pensé que no llegaba, entonces imagine la cara de mis hijas viendo que su querido papa salía con las manos vacias, resurgí cual ave fénix y sacando fuerzas de no se donde llegue a cogerla, al salir a la superficie me quedaban las fuerzas justas para que me hicieran la foto con la estrella, pero salve mi honor con aparente éxito.Luego llegamos a las piscinas naturales, ahí ya pudimos bajar todos, vitamina R, merengue y mucha fiesta, ahora ya hay muchas embarcaciones pero hay sitio para todos. Este lugar es maravilloso, el agua te llega por la cintura y puedes hacer unas fotos preciosas, yo llevaba una cámara de las de usar y tirar, así podías bajarla sin miedo a que se mojase.A la vuelta el espectáculo son los piques que tienen todos los capitanes con sus lanchas, cada uno coge un carril imaginario y a todo gas,Al llegar frente a Bayahibe, antes de finalizar la excursión el capitán nos propone hacer la ultima inmersión, yo a estas alturas del dia ya no tengo miedo al ridículo y vuelvo a saltar al agua tapadome la nariz. Otro espectáculo inolvidable, cientos de peces de todos los colores nadan a nuestro alrededor atraidos por la comida que les damos, es el extraordinario colofón a un dia que nunca olvidaremos. Ya para finalizar la tripulación se despide de nosotros y con mucha jovialidad nos piden una propinilla, bueno, nos han tratado muy bien, siempre queda algún dólar en el bolsillo.Ya en tierra nos espera Rafa, y le pedimos que ponga a Omega, que ya se ha convertido en la banda sonora de nuestro viaje.Al llegar al hotel me di cuenta que ese dia me había enamorado de este país y de sus gentes.Espero no haya sido demasiado farragoso y os sea útil toda esta información, lo he intentado contar de manera amena y salirme un poco de los canones habituales. Ya sabeis que si necesitais cualquier información adicional, os la doy “con mucho gusto” como dicen allí.DAVID
Enviat per patacot de la ribera a 15:36

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